Cómo crear un dormitorio relajado en unos pocos pasos sencillos
Después de un largo día, entrar en tu dormitorio debería de sentirse como un lugar lejos del mundo. Sin embargo, es fácil que este espacio esté lleno de ropa sucia, ropa que necesita doblarse o incluso papeles de trabajo.
Sigue los siguientes cuatro consejos que te damos a continuación para replantearte la forma en la que ves tu habitación y asegurarte que este espacio siga siendo tu santuario sin importar lo loca que a veces se vuelve la vida.
Selecciona una paleta de colores relajantes: cuando vuelvas a imaginar tu dormitorio, elige una paleta de colores que realmente te calme o te anime. Para un ambiente tranquilo, opta por los azules o morados. Si prefieres un impulso de energía, los verdes son tu mejor apuesta. Una paleta de colores monocromática blanca te ofrecerá un ambiente tranquilo y limpio. Incorpora los colores que elegiste para tu espacio a través del color en la pared, la ropa de cama o accesorios, y el tono general de tu espacio comenzará a cambiar.
Emplea el almacenamiento inteligente para frenar el caos: un dormitorio desordenado no te hará sentir a gusto, sin importar la paleta de colores. Si aun no lo has hecho, instala un sistema de clóset funcional que esté diseñado específicamente para tus necesidades. Esto hará más fácil prepararte por las mañanas y guardar la ropa sucia. Evita llevar artículos tales como archivos de trabajo, tu laptop y tu bolsa -en conjunto -en la habitación. Si estos elementos terminan en este espacio, considera almacenarlos en una cesta de fácil acceso o en una bandeja debajo de tu cama donde queden fuera de la vista.
Incorpora acentos que tranquilicen: ropa de cama, almohadas y cobijas suaves pueden añadirse a la atmósfera relajante en tu habitación. Si tienes el espacio, considera agregar una silla acogedora o banco al lado de una ventana para crear un rincón de lectura.
Saca provecho de la iluminación: la iluminación es otro componente de gran alcance que puede traer algo de paz adicional a tu espacio. Incorpora una delicada lámpara en la pared o en el techo de tu dormitorio o pon una lámpara pequeña con estilo en tu mesita de noche para permitir varios niveles de iluminación.